Sábado 30 de junio de 2012
DESPUÉS DE 9 AÑOS DE PRISIÓN
Romina Tejerina en libertad
Después
de 9 años de cárcel, Romina Tejerina salió en libertad, por cumplirse
los dos tercios de su injusta condena a 14 años de prisión. Una feliz
noticia para todas y todos los que, desde hace casi una década, venimos
reclamando su libertad incondicional.
La misma justicia que la condenó, la Iglesia
reaccionaria y los medios locales que siempre la atacaron para
conseguir también su “condena social”, redoblaron su campaña sucia de
hostigamiento y discriminación. Libre de las rejas materiales, pero
cercada por quienes insisten en señalar a la víctima como “culpable”,
Romina sufrió una crisis nerviosa.
Romina fue violada. Quedó embarazada y, como miles de
mujeres jóvenes y pobres del país, no pudo acceder a la interrupción
legal de ese embarazo forzado. Mientras la justicia dejó en libertad al
violador, “Pocho” Vargas, después de apenas 23 días de prisión, ella
fue estigmatizada por usar minifalda, por ir a bailar y por ser una
joven pobre. ¡Para los reaccionarios tribunales de esta justicia para
ricos que nunca osó encarcelar al empresario genocida Blaquier, la
víctima –en este caso- se convertía en culpable!
Una bandera de lucha del movimiento de mujeres
La lucha por su libertad se convirtió en bandera del
movimiento de mujeres de Argentina: en cada Encuentro Nacional de
Mujeres, en cada movilización, cada día de lucha por el derecho al
aborto y contra la violencia machista en cada acto y en cada debate y
pronunciamiento, denunció su situación y exigió su liberación sin
condiciones.
Pan y Rosas y la Juventud del PTS estuvimos siempre
junto a Romina: logramos que distintas comisiones internas, comisiones
de mujeres de los sindicatos, centros de estudiantes y consejos
directivos de universidades se pronunciaran por su libertad. Las
visitas a Romina en prisión, llevar sus mensajes a los encuentros y
movilizaciones de mujeres y volver con palabras de aliento y
solidaridad, que le enviaban desde distintos puntos del país, fue una
tarea constante durante estos años. Por eso, aunque hoy nos reconforta
saber que Romina está junto a sus seres queridos, lejos de la prisión,
no nos damos por vencidas. Sabemos que su libertad es “condicional” y
que, por lo tanto, la lucha no terminó. Las mujeres de Pan y Rosas y la
Juventud del PTS ratificamos la necesidad de organizarnos para
conquistar la libertad incondicional para Romina, pero también para que
ninguna mujer tenga que atravesar esta cruel situación mientras sobre
los agresores cae un manto de impunidad.
Por el derecho al aborto seguro, libre y gratuito
La presidenta ya no deja más lugar a dudas: mientras
dure su mandato no habrá derecho al aborto en Argentina. Esto no es un
problema “ideológico” que podamos debatir con tanta parsimonia,
¡mientras mueren más de 300 mujeres, cada año, por las consecuencias de
los abortos clandestinos! Una situación que es mucho más grave en las
provincias del norte del país, donde la Iglesia, los gobernadores, la
justicia y los medios de comunicación mantienen, legitiman y reproducen
las brutales condiciones de opresión de las mujeres. Especialmente, de
las mujeres trabajadoras, desocupadas y las jóvenes de los barrios
pobres.
Por eso, la lucha por la libertad definitiva y sin
condicionamientos de Romina Tejerina va de la mano con la lucha por el
derecho al aborto. Para que no haya más mujeres condenadas
violentamente a ser madres contra su voluntad, para que no haya tampoco
ni una sola muerta más por abortos clandestinos.
No será el gobierno de Cristina Kirchner, con sus
discursos cada vez más reaccionarios y antiobreros, quien nos conceda
nuestros derechos, si no peleamos por ellos. Por eso llamamos a
redoblar los esfuerzos para poner en pie un verdadero y activo
movimiento de lucha que le arranque nuestros derechos al Congreso, sin
depositar confianza más que en nuestras propias fuerzas.
Eli Díaz
Me entere temprano de la libertad de Romina y me corrió
por el cuerpo una linda sensación: alegría, emoción, ganas de
abrazarla. Sentí algo que sólo puede entender alguien que paso por lo
mismo que ella. Espero que Romina pueda soportar todos los prejuicios
sociales y tenga las mismas fuerzas que tuvo para soportar los 9 años
de dolor e injusticia que padeció en la cárcel.