
Toda nuestra solidaridad con las mujeres y todo el pueblo hondureño en lucha
Rechazamos, además, la injerencia de la OEA –comandada por el imperialismo yanqui-, cuyo secretario general, José Miguel Insulza, arribará hoy al país con la clara intención de negociar con los golpistas “una salida a la crisis política.” Esta “salida” no es otra cosa que el restablecimiento de un régimen que, con o sin Zelaya, no sólo garantiza los intereses de empresarios y terratenientes hondureños, sino también la futura impunidad para los golpistas.
Las mujeres en lucha, el pueblo trabajador de Honduras y quienes nos movilizamos en toda Latinoamérica y el mundo contra el golpe no podemos confiar que la OEA –que, en su historia, reconoció a todas las sanguinarias dictaduras de América Latina de los ’70 y ’80, que sostuvo durante más de cuatro décadas el criminal bloqueo a Cuba y que apoya la sumisión de los países latinoamericanos al imperialismo- pueda dar una salida favorable a los sectores populares y sus libertades democráticas. Todo lo contrario: busca una solución “consensuada” con los golpistas.
Por eso, las mujeres de Pan y Rosas llamamos a la más amplia movilización popular contra el golpe en Honduras y a confiar sólo en nuestras propias fuerzas, la de los explotados y oprimidos, para derrocar el golpe y evitar que se consolide un cónclave reaccionario en la región, sentando un nefasto precedente en nuestro continente.
Abajo el golpe y el estado de sitio
Ninguna negociación con los golpistas
Fuera el imperialismo yanqui
Nuestra solidaridad con las mujeres y todo el pueblo hondureño en lucha
Pan y Rosas
3 de julio de 2009.